«#PideAPearson que los colegios no sean negocios porque #LosNiñosSeMerecen una buena educación pública @pearson.» (#TellPearson en inglés) Este fue uno de los lemas de líderes de sindicatos educativos y padres en su acción contra la privatización educativa en Londres, Reino Unido.
El pasado 24 de abril, un grupo de sindicatos y agencias internacionales llevó a cabo una acción durante la reunión anual de accionistas y junta directiva de la empresa educativa Pearson.Pearson ha convertido la educación en un negocio a través de proyectos en más de 80 países.
El grupo estaba formado por la American Federation of Teachers (AFT)/Estados Unidos, el National Union ofTeachers (NUT)/Reino Unido, la Association of Teachers and Lecturers (ATL)/Reino Unido, el Australian Education Union (AEU)/Australia y el South African Democratic Teachers’ Union (SADTU)/Sudáfrica, todos afiliados a la Internacional de la Educación (IE), así como Global Justice Now y ActionAid.
La acción de los docentes incluyó la presentación de una carta a la junta directiva de Pearson, junto con las firmas de la “Petición Pide a Pearson (Tell Pearson)”, hasta ahora de 30.000 personas, que exigen que Pearson deje de controlar a los niños y niñas y saque a la luz sus contratos para un análisis público.
La agrupación internacional solicitó que Pearson mida el impacto social, emocional y académico de sus prácticas educativas en Estados Unidos, Reino Unido y los países en desarrollo.
Se solicitaron tres medidas a Pearson:
- Dejar de espiar a los niños
- Abandonar su proyecto de educación como negocio en el hemisferio sur
- Eliminar los exámenes excluyentes
Una influencia amplia
El mercado educativo tiene un valor de 4,2 billones de dólares en todo el mundo y cada vez más empresas buscan lucrarse a su costa.Pearson es una empresa que lidera el campo de la educación lucrativa y su influencia sobre gobiernos, política educativa y vida escolar en todo el mundo es amplia. La ejerce mediante presión directa y con la financiación de investigaciones académicas, centros de estudios liberales y grupos de presión empresariales.
Los activistas coincidieron en que estas prácticas empresariales que perjudican a niños no solo en Reino Unido sino también en todo el mundo deben eliminarse.
NUT:Educación para el bien público, no para el beneficio
«Las actividades de Pearson en todo el mundo reflejan su intención de comercializar y privatizar la educación en todos los niveles», afirmó Christine Blower, Secretaria General del NUT.
«Pearson debe poner fin a su relación con colegios privados de pago en el hemisferio sur, acabar con todas las prácticas que fomentan y apoyan la obsesión con los exámenes excluyentes y negociar con los sindicatos de docentes y otros agentes un acuerdo sobre el papel adecuado del negocio educativo», declaró Blower.
También destacó que «la educación es un derecho humano y civil, así como un bien público, en beneficio de los estudiantes y de la sociedad, no del lucro privado».
ATL:Mayor desigualdad
Mary Bousted, Secretaria General de ATL, coincidía en que «nadie ha de olvidar que la educación es un derecho humano que no debería desvirtuarse por motivos económicos». Además, añadió que «los planes de estudios escolares no deben patentarse ni cobrarse, y que los exámenes no tendrían que distorsionar lo que se enseña y cómo se evalúa».
«La obtención de beneficios se va integrando en los sistemas educativos de todo el mundo y, por desgracia, estos principios fundamentales se ven aún más amenazados y el resultado es una mayor desigualdad y la exclusión de los niños y jóvenes con menos recursos», concluyó.
AFT:La importancia del impacto social
Randi Weingarten, Presidenta de la AFT también pidió a Pearson que sus actos sean coherentes con las palabras de sus líderes que se definen como una empresa con responsabilidad social.«Aunque reconozco que Pearson tiene un compromiso con sus acciones y ha de ser rentable, mi pregunta está relacionada con otra obligación:gestionar su negocio de forma que se beneficie la empresa educativa más grande del mundo, es decir, en palabras textuales de su Presidente John Fallon, “de modo que los productos se midan por su impacto social”», afirmó.
«Los niños de todo el mundo deberían poder acceder a una educación gratuita de gran calidad», indicó Weingarten. También pidió a Pearson que deje de cobrar a los más pobres del mundo hasta un 30 por ciento de sus ingresos para que solo uno de sus hijos pueda ir al colegio.
Actividad en Twitter
El hashtag #TellPearson se usó bastante en Twitter ese día, con tuits como los siguientes:
#PideAPearson que deje de controlar las redes sociales #LosNiñosSeMerecen que @pearson no les espíe
#PideAPearson que elimine los exámenes excluyentes porque #LosNiñosSeMerecen una educación mejor @pearson
¿Un 40% de tus ingresos para que solo 1 hijo pueda estudiar?#PideAPearson:que deje de aprovecharse de los trabajadores más pobres del mundo http://aft.to/pearsonGS @pearson
El panfleto que repartieron los sindicalistas del sector educativo en Londres durante la junta anual de accionistas de Pearson se puede descargar aquí.