El grupo editorial ha sido objeto de críticas en Sudáfrica después de que uno de sus libros de texto ha sugerido que una víctima de violación tuvo culpa por el crimen
Con informaciones de The Guardian
El libro de texto del grupo editorial británico Pearson, dirigido a estudiantes de 15 a 16 años de edad, incluye una pregunta basada en el relato de una niña al ser violada en una fiesta.
En el ejemplo, una chica llamada Angie explica que fue a una fiesta sin el permiso de sus padres, se embriagó y la encerraron en una habitación con un chico que la violó. Se les pide a las/los estudiantes responder a tres preguntas, en la primera de las cuales se lee: “Diga de dos maneras por qué el comportamiento de Angie resultó en relaciones sexuales.”
El libro de texto ha estado en circulación desde el 2011, pero la sección ofensiva ganó atención después de que fue publicada en Facebook por la sudafricana Yonela Palesa Moopelwa, que escribió: “¿Cómo se puede permitir esto en un país en que las estadísticas de violaciones son terribles?”.
Sudáfrica tiene las tasas más altas de violación en el mundo, según la ONU, con estadísticas de 147 delitos sexuales al día.
El post ha inspirado una petición online que exige que el Departamento de Educación sudafricano elimine el texto, revise el proceso de aprobación del material educativo y tome medidas para explicar a las y los profesoras/es y estudiantes por qué la premisa de la pregunta es mala.
Un vocero de Pearson dijo: “Se nos ha explicado la redacción de la publicación. No creemos que esta frase refleje fielmente cómo se enseña el tema y hemos modificado de inmediato la redacción del texto”.
De acuerdo con David Archer, director de desarrollo de programas de la ActionAid International y miembro del Comité Directivo de la Campaña Mundial por la Educación, el caso “plantea serias dudas sobre el control de calidad en la empresa de educación más grande del mundo y demuestra la importancia de que los gobiernos supervisen la presencia del sector privado en la educación mucho más de cerca”.
La Pearson es una multinacional ubicada en Londres que ha sido criticada por la creación de un monopolio educativo, controlando todos los elementos del proceso, como licencias de maestras/os, planes de estudios, pruebas para evaluar a las y los estudiantes, clasificación de pruebas y la propiedad y operación cada vez mayor de sus propias instituciones de aprendizaje.